El Registro Nacional de Derechos de Emisión (RENADE), ha entrado oficialmente en funcionamiento tras superar las pruebas de la Comisión Europea y obtener la aprobación de la misma. De esta forma, España se convierte en el noveno país de Europa en poner en marcha un sistema que dará cuenta de los propietarios de derechos de gases contaminantes y de las operaciones de compra y venta que se realicen.

El Gobierno encomendó la gestión técnica del Registro Nacional de Derechos de Emisión a IBERCLEAR “Sociedad de Gestión de los Sistemas de Registro, Compensación y Liquidación de Valores, S.A. (Sociedad de Sistemas)”. Este registro está adscrito al Ministerio de Medio Ambiente.

Según informa el Ministerio de Medio Ambiente en nota de prensa, el RENADE es un elemento esencial para el seguimiento del cumplimiento de las obligaciones del Protocolo de Kioto, así como para el establecimiento y funcionamiento del sistema comunitario de comercio de derechos de emisión que ha comenzado en este año 2005.

Una de las obligaciones de los Estados, contemplada en la Directiva de Comercio de Emisiones, es la creación de un registro nacional en el que aparezcan recogidos todos y cada uno de los derechos de emisión incluidos en el plan nacional de asignación. Este registro debe ser compatible con lo previsto en las disposiciones de Naciones Unidas, con la directiva 2003/87/CE y con el Reglamento de la Comisión relativo a un régimen normalizado y garantizado de registros nacionales.

El registro se configura como una base de datos electrónica en la que constará quién dispone de derechos de emisión y en qué cuantía, y en la que se actualizarán de forma permanente todas las operaciones relativas a la expedición, titularidad, transmisión, transferencia, entrega, retirada y cancelación de estos derechos.

De esta manera España ha tomado las medidas necesarias para el establecimiento de su Registro Nacional de Derechos de Emisión, a través del cual se asegura la publicidad y la permanente actualización de la titularidad y control de los derechos de emisión, porque cada operación se apunta de manera inmediata, de forma que el registro se encuentra permanentemente actualizado.

El diseño y la construcción del RENADE se han realizado con arreglo al régimen comunitario y es compatible con lo exigido por el Protocolo de Kioto, y por lo tanto debe admitir las distintas unidades, entre ellas, las provenientes de los mecanismos basados en proyectos.

Tras superar las pruebas de la Comisión y obtener su aprobación, el RENADE se pone en funcionamiento y es totalmente operativo, lo que significa en la práctica que las instalaciones sometidas al ámbito de aplicación de la Ley 1/2005 por la que se regula el régimen de comercio de derechos de emisión de gases de efecto invernadero, así como cualquier otro interesado que cumpla los requisitos establecidos en la ley, pueden tener cuentas abiertas en el registro nacional desde las que se podrá comprar y vender derechos de emisión.

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