Con la nueva normativa de Certificación Energética de Edificios, que entrará en vigor el próximo año, los edificios serán clasificados en siete categorías (de la A a la G), en función de su eficiencia en el consumo de energía.

Según ha declarado el director del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE), Javier García Breva, las exigencias para nuevos edificios en materia de consumo de energía serán aplicables a partir de enero de 2006, de acuerdo con lo fijado por la Unión Europea.

Previamente, antes de fin de año, han de ser aprobados el próximo Código Técnico de Edificación, el nuevo Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios (RITE) y la normativa de Certificación Energética de Edificios. García Breva indicó que la elaboración de las tres citadas leyes se encuentra en fase avanzada. De hecho, el IDAE ya ha entregado sus borradores para el diseño del nuevo RITE y de la normativa de Certificación.

Con estas normas, el ordenamiento español procederá a la transposición de la directiva europea de Eficiencia Energética de Edificios, que regula lo relativo a materiales, aislantes, equipos de refrigeración, instalaciones térmicas y aprovechamiento de energía solar en las construcciones.

El director del IDAE explicó que esas nuevas normas serán "de mínimos", ya que su desarrollo y cumplimiento dependerá de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos, que son las administraciones competentes en este ámbito. No obstante, por encima de la labor de los gestores autonómicos y locales, García Breva resaltó la importancia del trabajo de los agentes del sector de la edificación para el logro de un buen nivel de eficiencia energética en las nuevas construcciones.

Asimismo, recordó que una construcción que respete los criterios de consumo racional puede ver cómo un encarecimiento "mínimo" en fase de edificación se convierte año tras año en importantes ahorros de hasta el 60% en facturas de electricidad.

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